Ideal en la construcción y elaboración de elementos y estructuras de concreto expuesto al ataque de los sulfatos y a los agregados reactivos que reaccionan con los álcalis de los cementos además de ofrecer un moderado calor de hidratación. Recomendaciones de uso Utilizar arena, grava y agua libres de contaminación conforme a lo especificado en la norma NMX-C-111 vigente y NMX-C-122 vigente. Permite el empleo de agregados potencialmente reactivos en la producción de concreto. Utilizar la cantidad de agua estrictamente necesaria para obtener la trabajabilidad requerida de la mezcla, con el fin de evitar la reducción de resistencia y el agrietamiento del concreto. Se sugiere aplicar las recomendaciones del reglamento de construcción ACI 318 para obtener una relación agua-cemento tan baja como sea posible. Para alcanzar aún mayores resistencias y durabilidad del concreto, es recomendable el empleo de reductores de agua de alto rango. Asegurar obtener una mezcla uniforme. Compactar al máximo el concreto en estado fresco para eliminar los huecos y con ello disminuir la permeabilidad en estado endurecido, teniendo precaución de no segregar y provocar exudación excesiva. Curar el concreto de manera continua y permanente por lo menos 7 días, manteniendo la superficie del concreto húmeda para garantizar el desarrollo de resistencia y reducir el agrietamiento. Proteger la superficie del concreto de pisos y losas recién coladas en condiciones ambientales extremas (calor, viento, frío y baja humedad relativa), para evitar la pérdida de humedad, favoreciendo así la ganancia de resistencia y la reducción de agrietamiento.